Sant Balbir Singh Seechewal, mejor conocido como “Eco Baba” por sus desinteresados servicios al medio ambiente en India, es un claro ejemplo de que, con nuestros actos, podemos generar cambios en la sociedad.
La historia de este ambientalista nacido en la región de Punjab (entre India y Pakistán) le ha dado la vuelta al mundo, ya que ante la pasividad del gobierno de India, COMANDÓ una de las iniciativas ecológicas más importantes del país. Con sus propias manos y con la ayuda de un grupo de voluntarios, limpió un río entero de 160 kilómetros de longitud y esto lo llevó a convertirse en el héroe y la inspiración de muchas personas alrededor del mundo después de lograr semejante hazaña ecológica.
UNA ALCANTARILLA ABIERTA
El Río Kali Bein, uno de los ríos más emblemáticos del país, en Punjab (India) no siempre fue hermoso, hace unos años, el río estaba completamente contaminado debido a que recibía toda la basura de las casas e industrias de la zona y estaba muy cerca de perder la capacidad de albergar vida.
VOLUNTAD CONTRA DESTINO
Sus ánimos se fueron al piso ante la pasividad del Gobierno, él relata que se le rompía el corazón el estado en el que veía el río Kali Bein. La contaminación, el impacto de la industrialización y la sistemática ausencia de cuidados durante décadas, habían convertido lo que debía ser un valioso recurso natural para los habitantes del lugar, en un vertedero descontrolado, una alcantarilla abierta. Su paciencia se agotó en el año 2000 y decidió pasar a la acción, ya que el río estaba totalmente cubierto de basura y corría el riesgo de desaparecer, pues la corriente del lecho se estaba secando de golpe y había perdido la mayor parte de su superficie, si las autoridades no salvaban al Kali Bein, lo haría él mismo.
Así que sin ayuda del gobierno ni de ninguna institución, Sant Balbir trabajó para convencer, reunir y movilizar alrededor de 200 voluntarios de veinte aldeas y acudir al rescate del río para limpiar sus aguas. Él mismo se puso a trabajar sin dudarlo un instante, para liderar las tareas de restauración. Y eliminar toda la contaminación del río, su entusiasmo creo en los ciudadanos que se sumaron a la causa una conciencia de la necesidad de una MEJOR GESTIÓN DE LOS RESIDUOS. Sant Balbir puso en marcha una campaña de información para animar a los aldeanos a evacuar las aguas sucias de otras maneras. Algunos pueblos a continuación, reavivaron los viejos métodos de eliminación y tratamiento de residuos.
Se aportaron trabajo físico e ideas para llevar a cabo la ardua tarea hercúlea de limpiar el río y devolverle su fuerza vital. Juntos retiraron del río y sus arroyos toneladas y toneladas de basura, y plantas invasoras (debido a la contaminación).
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“Algunas gentes se habían adueñado ilegalmente del río y fue muy difícil liberarlo de sus garras, pero con la gracia de Dios lo hemos logrado. El trabajo que hemos hecho es para el bienestar de la humanidad y ninguna obra puede ser más sagrada que esta. Nuestro esfuerzo en el Kali Bein ha enviado un mensaje a todo el mundo” explica Sant Balbir, alguien que nos muestra como la determinación puede llevarnos a hacer realidad lo que nos propongamos.
Fue necesaria voluntad y un esfuerzo continuado durante varios años, el trabajo de restauración de los 160 kilómetros del río tardo casi diez años en completarse, pero poco a poco los resultados fueron saltando a la vista.
Cuando limpiaron el lecho del río, y las fuentes naturales que lo nutrían, estas renacieron, reemplazando el agua estancada por agua limpia, así se reconstruyo el flujo natural del agua, los resultados fueron casi inmediatos pero a pesar de que el río se llenó, esto era insuficiente sin una estabilización de las riberas, así que plantaron plantas, flores y todo tipo de árboles en ambas orillas a lo largo de los 160 kilómetros de curso recuperado del río y la pesca fue prohibida con el fin de salvaguardar la biodiversidad. Esto hizo que se embelleciera y restaurara un hábitat muerto, resucitó el ecosistema de varias especies, se revitalizaron las áreas que estaban áridas y secas desde hace años y enverdecieron las orillas del río, esto le devolvió la fauna perimetral que había perdido el río por la contaminación. El río Kali Bein se recuperó y ahora luce vivo y renovado, volvió a brillar y tener vida.
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Incluso construyeron puentes, terraplenes y caminos de ladrillo a lo largo del río, para que toda la comunidad pueda pasear por la zona y disfrutar de la conexión con la naturaleza. Las familias van allí a hacer picnics y los rituales de baño tienen lugar aquí durante las festividades religiosas. Todo sin la ayuda del gobierno o de cualquier institución.
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CREANDO CONCIENCIA
Para conservar la limpieza del río, el héroe medioambiental, desplegó programas educativos para generar conciencia ecológica en la comunidad. La idea era que cada una de las personas que habitan la zona entendieran la importancia de no botar contaminantes al río.
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Y no sólo lograron descontaminar el río, resulto que habían terminado con otro de los peores problemas de la localidad, la sequía y la escasez de agua potable y el drama de las aguas residuales. Punjab se benefició de su iniciativa, tanto ambiental como económicamente.
Uno de los aspectos más destacados de las labores de recuperación es que Sant Balbir también ideó un sistema de alcantarillado subterráneo de muy bajo costo para más de 50 aldeas. Y debido al impacto tan grande que tuvo en el gobierno de Punjab la tarea de limpieza del río liderada por Sant Balbir, estos lo ayudaron a construir este sistema. Gracias a esto las aguas residuales que antes iban a parar al río se almacenan ahora en estanques, donde son tratadas de una manera natural para que puedan aprovecharse en agricultura. Una solución casi milagrosa Esto último fue un gran respiro para las más de 50 aldeas del lugar donde se implementó, ya que muchos agricultores no disponían de agua suficiente y esto solía acabar con numerosas cosechas haciendo que cientos de familias terminaran en la miseria e incluso algunos llegaron a suicidarse por la falta de recursos para subsistir.
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Sant Balbir completó de este modo su mayor hazaña en defensa de la naturaleza.
La revista Time catalogo a Sant Balbir como “Héroe del Medio Ambiente”. Esta historia demuestra cuánto puede lograrse a fuerza de voluntad, solidaridad y trabajo en equipo. Sant Balbir es un referente para todo el mundo, ya que con muy pocos recursos, consiguió concienciar a todo un país sobre la importancia de la ecología.
Pero desde ya sus acciones no sólo están generando consciencia entre la población en India sobre la necesidad de preservar el entorno, sino que está demostrando al mundo que una sola persona, con una buena idea y una voluntad firme, puede lograr cosas absolutamente extraordinarias.
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Ahora el gobierno lo ha contactado para pedirle que lleve a cabo una misión todavía más faraónica: limpiar el sagrado Ganges.
Por muchos es sabido el grave problema que enfrenta el Ganges que ha sido víctima de una vil y catastrófica contaminación. Sant Balbir necesitará mucho ingenio y apoyo para devolver la vida a este emblemático río.
Sant Balbir ha trabajado también creando centros de educación con el fin de erradicar la pobreza, la ignorancia, las supersticiones y el abuso en contra de las mujeres por la violencia machista.
Fuente: blog “the logical indian”
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